Comienza el año electoral en Estados Unidos (EU). 230 millones de ciudadanos estarán llamados a las urnas el próximo 5 de noviembre para elegir al nuevo ocupante de la Casa Blanca, a Representantes, Senadores, y en 11 estados a gobernadores de los cuales ocho están en manos de los del elefante y tres con los del burro. La joya de la corona es la Oficina Oval.
Te recomendamos:
De cara al arranque de las elecciones primarias en los estados, los suspirantes a dirigir los destinos de la Unión Americana por parte de los republicanos son principalmente tres: Donald Trump, Nikki Haley y Ron De Santis.
Te podría interesar:
EZLN, entre Marcos y Andrés Contreras
Del lado demócrata busca repetir al frente de la presidencia Joe Biden. Cada bando arranca en condiciones diferentes. Comencemos por quien ocupa la oficina del Ala Oeste de la Casa Blanca. Joe Biden no se encuentra en el mejor momento de su presidencia, aunque también es cierto que luego de tres años en Washington no ha tenido buenos momentos en general.
En realidad, han sido más de mil días nadando contra corriente. Su nivel de popularidad según las encuestas no rebasa los cuarenta puntos porcentuales. Aún así, jugará con todo el aparato del gobierno a su favor.
Hay dos demócratas con intenciones de disputarle la candidatura al presidente: el representante Dean Phillips, de Minnesota, y la escritora Marianne Williamson, aunque ninguno se muestra con el apoyo necesario para quedarse con la candidatura.
En el caso de los republicanos las cosas se muestran con más variables. Donald Trump lo mismo encabeza las encuestas para ganar la denominación de su partido con 60% de la intención de voto en la interna republicana, como las preferencias en un enfrentamiento con Joe Biden, pero también lleva mano en el número de demandas penales que pesan en su contra.
La segunda en la carrera es la ex gobernadora de Carolina del Sur y ex embajadora de Estados Unidos en la ONU, Nikki Haley, seguida por un lejano tercer lugar ocupado por el gobernador de la Florida, Ron De Santis.
Además de las demandas judiciales, sobre todo la relacionada con el asalto al Capitolio el 6 de enero de 2021, haberse llevado documentos ultrasecretos cuando se fue de la Casa Blanca y de haber pagado dinero a una actriz porno para que guardara silencio en vísperas de las elecciones, Trump enfrenta la
decisión de Colorado y Maine de declararlo inelegible para la presidencia, lo cual impediría que aparezca su nombre en las boletas de las primarias en esos estados.
Las razones que da el Tribunal Supremo de Colorado se sustentan en la interpretación de la sección tercera de la Enmienda 14 que prohíbe a cualquier persona ocupar un cargo público si ha participado en “insurrección o rebelión” después de haber prometido apoyar y defender la Constitución.
La Corte Suprema de Estados Unidos, con mayoría de jueces conservadores, incluidos tres nombrados por Trump, aceptó analizar y decidir si Trump puede presentarse a las elecciones primarias en Colorado.
En caso de que los jueces no quieran entrarle a la discusión, pueden regresarlo a otras instancias del gobierno invocando el principio conocido como la “doctrina de la cuestión política”, para retirarse de la descalificación de Trump, pero hacerlo probablemente dejaría vigente la decisión de la Corte Suprema de Colorado.
Año electoral
Comienza el año electoral con una sociedad estadunidense desconfiada y dividida, y con una omnipresencia de Donald Trump fortaleciéndose cada vez que aparece una nueva acusación en su contra.
Sin olvidar la crítica a una envejecida clase política estadunidense que rebasa, en promedio, los 64 años en el Senado y los 58 en la Cámara de Representantes, sin dejar de lado que Joe Biden tiene 82 años de edad y Donal Trump 77.
Así las cosas, la primera primaria republicana será en Iowa el próximo 15 de enero y la segunda, el 23 de este mismo mes en New Hampshire, pero de eso hablaremos en nuestra próxima entrega.