Gustavo Monterrubio Alfaro
Develan estatua de Raúl Padilla. Un grupúsculo de pseudo universitarios corruptos y analfabetas funcionales, pudo haber alguna excepción en éste, pero sólo la que confirma la regla, protagonizó un bochornoso y deleznable acto, casi en secreto.
No obstante fue en la vía pública, sólo fueron invitados amigos íntimos y familiares, dijeron, develaron una estatua de un tipo que representa todo lo contrario de lo que una institución de educación superior enarbola como principios fundamentales.
Le inventaron virtudes que los universitarios y la sociedad en general ignorábamos que poseía, o al menos el tipo que conocí no tiene nada que ver con el que pergeñaron los apologistas convocados, se trata de Raúl Padilla López, quien fue el antihéroe de la distopía udegeísta, o sea, el Robin Hood de la canalla.
El mismo tipo presidió la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, no obstante, en su vida leyó un solo libro, uno solo; los lectores por encargo eran Misael Gradilla Damy, Javier Hurtado, Marco Antonio Cortés y Héctor Solís Gadea, son de los que sé que para eso le sirvieron y por ello fueron recompensados; sólo les pido a éstos si emiten una opinión sean honestos y sinceros.
Ni siquiera fue capaz de elaborar la tesis para obtener el grado de Licenciado en Historia, porque no conoció las aulas, pues su ocupación era la grilla no las actividades estudiantiles; la tesis en la que fue incluido el nombre de Raúl Padilla López la elaboró Jesús Gurrola.
A éste nunca lo recompensó, por el contrario, lo perjudicó, porque a Chuy Gurrola se le ocurrió contar a quien quisiera escucharlo la verdad sobre la tesis, y obvio, esto no agradó al ex cacique fugado. Esta es una excelente oportunidad para que Chuy Gurrola hable en público y no mienta sobre ese episodio trágico para él.
Este perfil es el mismo de los que le pretenden suceder y eternizar.
Si creen que pueden inmortalizar a ese sujeto y venderlo como el ejemplo para los estudiantes que no tienen otra opción que la UdeG, me temo que formarán y egresarán profesionistas expertos en corrupción, simulación, prevaricación, mediocridad y analfabetismo funcional.
Además, seguirán siendo los que dirijan a esta saqueada y decadente institución; estos son los valores que predican y practican los cachorros del cacique udegeísta fugado, o sea, Ricardo Villanueva y predecesores.
Esta universidad, la segunda del país por la matrícula, no produce ciencia ni dispositivos tecnológicos, salvo garbanzos de a libra merced al esfuerzo y tesón individual de investigadores decentes.
La docencia oscila de mediocre a pésima y en la cultura tiene aportaciones, gracias al ex cacique fugado, tales como confundir deliberadamente el negocio de la farándula, que era negocio importante del susodicho, con las actividades culturales, o sea, ponen en el mismo plano a Hamlet y la India María.
En cambio, produce funcionarios millonarios y multimillonarios como el ex cacique suicidado, que en su etapa estudiantil no traían ni para el camión, vivían en vecindades con baños y lavaderos comunes, en colonias proletarias o los mantuvieron mecenas de apellido Ramírez: estas son las verdaderas enseñanzas que deja Raúl Padilla López.
Propongo
1.- Que las autoridades federales, nunca las estatales, investiguen a familiares de Raúl Padilla López, colaboradores y prestanombres que usó para ocultar los millones que nos robó a los contribuyentes, que de probarse la ilicitud de los mismos se confisquen y lo recuperado pase a formar parte del patrimonio del fondo pensionario.
2.- Que el próximo rector general debe salir de la comunidad universitaria y cumplir con lo estipulado en la Ley Orgánica, por lo que deben ser excluidos de contender por el más alto cargo, quienes hayan ocupado cargos directivos en las organizaciones estudiantiles FEG y FEU, o esta institución educativa seguirá sumida en la corrupción, la simulación y la mediocridad.
3.- Que la Auditoría Superior de la Federación audite el fondo pensionario, del que tenemos fundadas sospechas de malos manejos, entre éstos, muy probablemente se desviaron dineros a los negocios personales de RPL, las llamadas empresas parauniversitarias, que ahora administra, si no estoy mal informado, Tonatiuh Bravo.
4.- Justamente que se auditen, por el mismo ente federal, las empresas parauniversitarias y si se comprueban desfalcos, robos u otros ilícitos, éstos sean sancionados y en todo caso, se liquiden para que no sigan sangrando el presupuesto universitario.
Por dignidad y para no causar más oprobio y escarnio a los universitarios y a la sociedad en general, esa pésima idea debe ser retirada de la vía pública.
No más porros dirigiendo la Universidad de Guadalajara. Es vergonzoso enaltecer delincuentes en detrimiento de la ética y la moral universitaria.