La alianza Ebrard y López Obrador

Segunda parte

Así se conocieron

Marcelo Ebrard dice que conoció a Andrés Manuel López Obrador negociando y defendiendo sus convicciones.

Él era secretario de Gobierno del Distrito Federal y López Obrador había llegado de Tabasco a tomar el Zócalo apoyando a pescadores y extrabajadores de Petróleos Mexicanos a quienes se les debía dinero.

A finales de agosto, a pocos días de las fiestas patrias de 1993. Hubo acuerdo y el tema se solucionó de manera pacífica y transparente, él tenía razón.

Reencuentro

Más tarde volverían a trabajar juntos y sería su jefe en el gobierno capitalino como también trabajando frente al mismo Zócalo, más tarde en el gobierno federal.

Los componentes de los acuerdos, dice, son ser consistente, respetuoso y cumplir los puntos aprobados en el consenso.

34 años después de recibirse de licenciado en Relaciones Internacionales, ejerció por primera vez la carrera cuando fue nombrado canciller por López Obrador en 2018.

El trato cálido se percibe en su declaración: “Es lo que estudiaste, ¿verdad?”, le dijo risueño cuando se lo propuso formalmente.

Ebrard se refiere a López Obrador como directo, sin rodeos, duro, pero muy coherente y con ideas claras sobre cómo sacar adelante el problema.

Apoyo político

En el año 2000 decidieron Ebrard y Camacho buscar a López Obrador y le ofrecieron su apoyo.

Con tres o cuatro puntos porcentuales de Ebrard y el PCD, para la elección por el Distrito Federal, declinó el ahora canciller, de la candidatura a favor de López Obrador, hicieron un pacto.

A partir de ese momento han actuado en equipo durante décadas. Los puntos porcentuales que aportó
Ebrard fueron la diferencia en el triunfo contra Santiago Creel del PAN.

Dice Ebrard que todo lo que han acordado con López Obrador lo han cumplido, ambos saben el valor de la palabra en un ambiente tan difícil como la política.

Ebrard apoyó a López Obrador en la Alianza por la Ciudad de México, obtuvieron el triunfo en la elección. Dejaron de verse de 2000 a 2002, cuando lo invitó a ser su secretario de Seguridad Pública.

Después Ebrard fue cesado por Vicente Fox por los sucesos de Tláhuac, en que el gobierno federal trató de involucrarlo en un incidente de policías federales linchados por los habitantes, por ser el secretario de Seguridad Pública del Distrito Federal.

El proceso se desinfló y se sobreseyó. En febrero de 2005, López Obrador nombra a Ebrard secretario de Desarrollo Social.

Ebrard manifiesta calidez en su relación con López Obrador, afirma que se conocen a fondo, se confían proyectos y cumplen la palabra.

Así ha sido en las campañas electorales que trabajaron en 2000, 2006, 2012 y 2018. Afirma que López Obrador es de liderazgo más duro, con formación nacida del combate social, mientras que la de Ebrard es más desde el Estado.

Ambos mantienen que no hay manera de mantener un régimen con las desigualdades del país, con la mitad de la población viviendo en la pobreza. Los mantiene juntos una relación de confianza, jamás se han mentido, afirma.

Jamás hubo de parte de ninguno de los dos un golpe bajo o una traición. Jamás han tenido una discusión fuerte, ni que López Obrador haya perdido la compostura.

López Obrador siempre ha sido respetuoso y hasta afectuoso afirma Ebrard.

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