El sobrepeso y la Alerta de Salud Infantil: 4 de cada 10 niños en México tienen sobrepeso u obesidad infantil representan una creciente preocupación de salud pública en México.
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Cifras recientes indican que 4 de cada 10 niños de entre 5 y 11 años presentan alteraciones en su peso, lo que los pone en riesgo de desarrollar, a mediano plazo, enfermedades graves consideradas históricamente como padecimientos de adultos, como la diabetes mellitus tipo 2 y las enfermedades cardiovasculares.
Causas: Sedentarismo y Productos Ultraprocesados
Expertos señalan que el cambio en el estilo de vida de los menores es el principal motor de esta crisis.
Alto consumo de calorías vacías: La amplia disponibilidad de productos industrializados ricos en calorías, azúcares y sodio impacta directamente en la composición corporal de los niños.
Aumento del sedentarismo: El tiempo excesivo frente a las pantallas ha incrementado la inactividad física, contribuyendo a la adquisición de una composición corporal poco saludable.
El Riesgo del Síndrome Metabólico en Niños
El aumento de peso puede ser la puerta de entrada a graves alteraciones metabólicas.
Los niños con problemas de sobrepeso y obesidad son propensos a desarrollar el Síndrome Metabólico, un conjunto de problemas de salud que incluyen alteraciones en:
Resistencia a la Insulina: Dificultad para que la glucosa ingrese a las células, lo que puede manifestarse físicamente como oscurecimiento de la piel en el cuello o las axilas.
Presión Arterial Alta (Hipertensión): Un padecimiento que, aunque asociado a adultos, se detecta cada vez más en la infancia.
Niveles anormales de triglicéridos, colesterol y glucosa en la sangre.
El Síndrome Metabólico expone a los niños a un alto riesgo de desarrollar diabetes o enfermedades cardiacas prematuramente. El riesgo es aún mayor si existen antecedentes familiares de diabetes o hipertensión.
Recomendaciones y Detección Oportuna
La buena noticia es que detectar el Síndrome Metabólico a tiempo tiene un buen pronóstico de evolución.
La infancia es la mejor etapa para implementar cambios que duren toda la vida.
Si se identifica un incremento de peso en el niño, es crucial:
Acudir a un nutriólogo:Para realizar una valoración de la composición corporal y detectar a tiempo el aumento de la grasa corporal.
Consultar a un endocrinólogo pediatra: Para un diagnóstico completo y la implementación de estrategias personalizadas.El abordaje implica cambios sostenibles en el estilo de vida familiar, incluyendo:Reducir el consumo de bebidas y productos industrializados con alto contenido de azúcar.
Asegurar un mínimo de 60 minutos diarios de actividad física que involucre fuerza, flexibilidad y resistencia.
Dejar atrás el sedentarismo para lograr una adecuada composición corporal.